Un dolor en la parte superior derecha del abdomen puede ser un signo de que se tiene un problema de algún tipo en el hígado. Si se tiene un problema de obesidad o se abusa en el consumo de bebidas alcohólicas en realidad una sensación diferente en el abdomen puede ser a causa de una afectación en el hígado.

Este órgano es uno de los más importantes en todo el cuerpo. No sólo por representar del 2 al 5 por ciento del peso corporal, pues el hígado tiene la función de regular la mayoría de los niveles de sustancias químicas de la sangre y secreta una sustancia denominada bilis, que transporta desechos desde el hígado.

Posee la capacidad de reserva y de regeneración, por lo tanto, cuando sufre un daño moderado. Su estructura y función pueden recuperarse a través de sus propios mecanismos de regeneración. Según indica un artículo de la Universidad Nacional Autónoma de México.

Cuando este órgano tiene algún problema que es persistente, extenso y severo, la destrucción paulatina de las células hepáticas, así como la acumulación de tejido fibroso, provocan que su estructura y función se afecten irreversiblemente.

Es por estos motivos, que se debe de tener atención en dolores que pueden relacionarse al hígado. Lo mejor es acudir con un médico para que pueda identificar algunos síntomas relacionados a padecimientos de este tipo.

Posibles síntomas

• Cansancio o fatiga crónica. Si hay cansancio sin realizar mucha actividad, si durante las labores diarias se refiere un agotamiento y se está en sobrepeso: es una alerta.
• Sensación de pesadez. Se refiere a una sensación de fatiga, pero que puede ir acompañado de calambres, hormigueos, sensación de calor, picores o prurito, hinchazón y dilataciones de las venas.
• Inflamación del abdomen. La zona específica del abdomen puede estar más sensible de lo normal e inclusive inflamada. Del mismo modo si se padece de sobrepeso es una señal de problema hepático.
• Pérdida del apetito. Junto con el cansancio y una eventualmente inflamación se puede acusar de una pérdida del apetito.
• Náuseas. Los ascos o náuseas se hacen presentes como síntomas de un tema hepático.
• Confusión, mala memoria. Los problemas hepáticos hacen que los alimentos y las sustancias no se procesen como debería ocurrir, de allí que exista desorientaciones o confusiones.

Los problemas hepáticos son la cuarta causa de mortalidad en México. Al sospechar que el dolor es producido por el hígado se tendrá que acudir con un médico. Este realizará una serie de pruebas específicas para determinar si en efecto el órgano de mayor tamaño en el cuerpo humano tiene funcionamiento anormal.

En Estados Unidos y en el mundo, uno de los problemas más comunes es el hígado graso. Este se divide por: hígado graso no alcohólico y graso por alcohol, también llamado esteatosis hepática alcohólica.

Para evitar afectaciones hepáticas lo más recomendable es cuidar la alimentación, consumiendo comidas balanceadas y realizar algún tipo de actividad física; cuidar el consumo de bebidas con alcohol es también importante.

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